El desafío de vender joyería en tiempos de crisis

Aunque actualmente la cautela se haya establecido en los hábitos de consumo de muchos ciudadanos, las joyas siguen siendo protagonistas en las ocasiones especiales. Una joya representa la oportunidad de materializar un momento único en nuestras vidas: ya sea una boda, un nacimiento, un aniversario, una comunión… Y aunque muchos de estos planes se hayan aplazado momentáneamente, no significa que se hayan anulado.

Las circunstancias particulares de cada consumidor sí puede modificar el tipo de joya que busca. El desembolso económico que pensaban hacer puede haberse visto mermado a causa de la crisis económica, pero no impide que siga buscando una joya especial.

La crisis sanitaria genera una gran desconfianza en el consumidor a la hora de acercarse a una tienda e interactuar con dependientes y otros clientes, compartiendo un espacio cerrado. Esto repercute negativamente en las tiendas que disponen de una gran oferta de diseños. Pero, si reducimos el stock, seguramente nuestra clientela no encontrará lo que viene buscando. ¿Cómo podemos sortear este inconveniente? ¿Dónde está el equilibrio entre el número de modelos que debemos tener en tienda para satisfacer las necesidades de los consumidores y lo que económicamente pueda resultar viable?

Como vendedores de joyería, ¿estamos preparados para evolucionar al mismo tiempo que los hábitos de consumo?

Antes de nada debemos analizar qué tipo de cliente es el nuestro. ¿Son todos usuarios de internet? Si no es así, ¿qué tipo de servicio están buscando y cómo podemos compaginarlo con los nuevos canales de venta, que cada vez ganan mayor protagonismo? Es imperativo mantener un buen servicio offline y online.

La venta online irrumpió ya hace unos años en nuestras vidas, pero ha sido durante este año cuando, confinados en nuestras casas, muchos compradores no han tenido más remedio que aceptar el hecho de que llegó para quedarse. E incluso existiendo muchos usuarios que prefieren comprar en una tienda física, bien es cierto que buscan y comparan antes de acercarse a un espacio comercial, teniendo una idea mucho más precisa de lo que quieren, lo que están dispuestos a pagar y dónde encontrarlo.

¿Crisis y/o oportunidad?

Un hecho incontestable en los nuevos hábitos de los consumidores es que necesitan sentirse especiales. ¿Quién no? Y una forma de hacerlo es buscar la personalización en el producto, tener la certeza de que un producto es lo más afín posible a los deseos de su destinatario. Una joya gana valor si el cliente participa en el proceso creativo y tiene poder de decisión sobre determinados aspectos de la pieza; si además se trata de un regalo para una persona querida, el componente afectivo es más alto. Muchos diseñadores reciben encargos especiales y tratan de replicar la idea del cliente en un boceto, realizado con mayor o menor grado de esmero. Y, dependiendo de nuestras capacidades artísticas, el cliente será capaz, o no, de hacerse una idea exacta del producto final.

Pero… ¿y si…

  • pudiéramos ofrecer SIEMPRE un producto personalizado?
  • el proceso de diseño pudiera ser mano a mano con el cliente?
  • … ese proceso pudiera durar apenas unos minutos?
  • …el cliente no tuviera que desplazarse a nuestra tienda o taller para hacerlo?
  • nuestro catálogo fuera tan amplio como quisiéramos sin necesidad de invertir en un stock costoso y una gran capacidad de almacenaje?
  • … fuera siempre sencillo generar contenido para nuestras redes sociales y canales de venta y/o comunicación online?

Una solución innovadora

CounterSketch es un software de diseño de joyería. Dicho así, muchos se sentirán un poco angustiados. «No sabré usarlo«, «el cliente no va a entenderlo«, podrán ser los pensamientos que aquejen a muchos vendedores. Nada más lejos de la realidad. Consiste en un catálogo de joyería totalmente personalizable, y para usarlo no es necesario contar con experiencia o conocimientos previos de modelado 3D. Empieza a mejorar, ¿verdad?

Con tan sólo algunas preguntas podremos averiguar qué tipo de modelo está buscando el cliente, ofrecerle modelos similares y modificarlos al momento en función de sus requerimientos. ¿Buscan un solitario? Mostramos la galería de solitarios. ¿Qué tipo de gema les gusta? Una talla ovalada, color azul. ¿Más grande? La hacemos más grande. ¿Las garras no convencen? Cambiamos las garras. ¿La sección del brazo del anillo no les gusta? Cambiamos la sección. ¿Qué talla tiene? Aplicamos la talla.

De forma simultánea podrán ver cómo el modelo se acerca a su idea, gracias a un render que muestra con precisión cómo va a quedar la joya.

Una vez definido el modelo de la pieza, podemos generar un presupuesto lo más aproximado posible, teniendo en cuenta el peso final y los materiales empleados. Y, finalmente, enviar el archivo a imprimir, o modificarlo con Rhinoceros. El cliente puede probarse el prototipo en resina; si todavía necesita hacer algún cambio, se puede recuperar el archivo y ejecutarlo de forma rápida.

Por otro lado, las redes sociales, e internet en general, ofrecen un escaparate enorme para nuestro cliente potencial. Si nuestros clientes potenciales van a buscar primero en internet qué tipo de joya les gusta o en qué joyería encontrarla… ¿no deberíamos fomentar nuestra presencia online? [HAZ CLIC AQUÍ PARA VER UNA TIENDA 100% CREADA CON RENDERS DE COUNTERSKETCH]

Generar contenido puede resultar tedioso a muchas personas; pero además, es importante tanto la cantidad como la calidad. Hasta hace relativamente poco, era necesario contratar a un fotógrafo especializado: un proceso costoso y no siempre rápido. CounterSketch solventa este problema: la calidad de los renders y la posibilidad de mostrar en unos pocos clics todas las partes de una pieza hace que la creación de contenidos para nuestra tienda online o nuestras redes sociales sean infinitamente más rápida, sencilla y barata. [MIRA CÓMO HACERLO EN LOS VÍDEOS MÁS ABAJO]

Finalmente, pero no menos importante, especialmente en los tiempos que estamos viviendo: ¿es necesario que el cliente venga físicamente a la tienda en todo el proceso? Podemos mantener una primera reunión para captar la idea que necesita por Skype, Zoom, incluso compartir pantalla para que nos vaya indicando qué busca mientras vamos creando. [MIRA CÓMO HACERLO EN EL VÍDEO MÁS ABAJO]


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